Es difícil distraerse de lo obvio, de las frases huecas y vacías
mil veces escuchadas después de un partido como el de esta tarde. En campos así
se ganan las Ligas… nos hemos sobrepuesto al juego duro y cerrado del rival…
Todos quieren hacer el partido del año cuando juegan contra el Madrid…
Comentario oídos y leídos hasta la extenuación que no por ello dejan de ser
ciertos después de lo visto esta tarde. Partido incómodo, ante un rival
incómodo, en un horario incómodo, con un tiempo incómodo… que se ha sacado
adelante además con varios titulares esperando su turno.
Quizá no era el momento de dar descanso a Hazard, un jugador
que da la impresión de que va cogiendo la forma según va jugando partidos. Ni
tampoco esperaba el descanso de Valverde, el que sostuvo al equipo durante los
80 minutos que jugó el martes, pero parece que a cambio hemos recuperado a Isco
para la causa. Esperemos que le dure, porque no me resigno a recuperar al
futbolista que deslumbro en las últimas finales de Champions, ese por el que se
peleaba media Europa, pero que como es español se le mira con otros ojos. Por
cierto, solo le falta meter el golito que lleva buscando unos meses para
dedicarle a su hijo nacido recientemente. Dos palos se lo han impedido en los últimos
partidos… A la tercera va la vencida…
Ahora toca agarrarse los machos para lo que se nos viene
encima… Espanyol, Brujas, Valencia, Barça y Athletic antes del paron navideño…
podemos terminar el año mucho mejor de lo que pensábamos que lo íbamos a hacer
cuando empezó. Hace falta que continúe ese compromiso, esa entrega, esa ambición…
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