Confieso que yo no daba un duro porque fueran a sacar algo
positivo del Sánchez Pizjuan. Es más, me jugué dinero a ello y lo he perdido.
Pero después del desastre del Parque de los Príncipes ¿Quién se esperaba algo así?
Y sin golpe de timón, sin cambiar a medio equipo… solo Ramos entraba con
respecto al pasado miércoles. Es cierto que las últimas ausencias del camero habían
sido extremadamente crudas para los resultados y sobre todo las sensaciones,
pero no creo que solamente haya sido por eso. Es el capitán. El que se supone
que más tira de sus compañeros pero ¿para llegar a tanto?
A lo mejor algo hay que poner en el haber de Zidane… porque
hoy Bale ha defendido más que nunca en su etapa como madridista. Ni en el
Tottenham siendo lateral izquierdo defendía tanto como lo ha hecho hoy.
Parecido ha ocurrido con Hazard, aparcando su lucimiento personal para
esforzarse por el equipo. Lo que parecía increíble sucedió. El Sevilla no tiró
a puerta en los 90 minutos. No vimos a Courtois en todo el partido. Igualaron a
los hispalenses en intensidad y compromiso… y la calidad superó al rival. Así
si se puede competir. Y no me imagino al entrenador francés dando gritos en la
caseta… Nadie sabe lo que ocurre de puertas hacia dentro del vestuario blanco
pero estos últimos días ha surtido efecto…
Si hace 3 dias no confiaba nada en el futuro próximo, hoy se
ven las cosas de otra manera. Pero todo se supedita a que sigan trabajando
igual que hoy. Tan fácil de decir y tan complicado de encontrar el compromiso. Porque
es justo eso: Compromiso. Solidaridad. Voluntad. Sacrificio. Compañerismo. Luchar todos juntos buscando el
mismo fin. Como un equipo.
Foto: 20minutos
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